Para muchos de nosotros, nos hemos acostumbrado a tener el software más actualizado disponible a través de nuestros dispositivos móviles e incluso los servicios en línea que utilizamos regularmente para el correo electrónico, la búsqueda o las compras. 

Hoy en día, al hablar de mantenimiento de software, no estamos hablando de nuevas características que se despliegan – estamos hablando de lanzamientos de mantenimiento, o actualizaciones de software “sólo de corrección de errores”. 

Los administradores de sistemas tienen muchas consideraciones a la hora de mantener a sus usuarios actualizados.

Hoy, discutiremos cinco mejores prácticas para que los administradores de sistemas mantengan a los usuarios satisfechos cuando se trata de actualizaciones de mantenimiento: programar, pensar holísticamente, revisar la urgencia, probar los cambios de forma incremental y repetir los cambios en la producción.

Cinco mejores prácticas para el mantenimiento de software

1. Programar

Asegúrate de programar el mantenimiento regularmente en base a la cantidad de usuarios. Establecer una expectativa del tiempo de mantenimiento con anticipación es crucial para los usuarios para que puedan planear con anticipación cualquier trabajo crítico que deba ser entregado. 

Esto es similar a las notificaciones de obras que puede ver en las calles durante su rutina diaria. Cuando sabes que el mantenimiento de software está por venir, puedes planear con anticipación para tomar una ruta alternativa o viajar en un momento diferente. 

Saber cuándo está programado el mantenimiento puede mejorar significativamente la experiencia del usuario. 

Recomiendo que las franjas horarias sean regulares y predecibles para el futuro inmediato y, lo más importante, que se publiquen a todos los usuarios. Por ejemplo, todos los domingos entre 12:00 AM – 2:00 AM para un ambiente de producción y todos los días entre 12:00 PM – 2:00 PM para un ambiente no productivo. 

2. Piensa de forma holística

La siguiente mejor práctica para los administradores de sistemas es pensar holísticamente en la pila de software. 

Específicamente, suscríbase para recibir notificaciones de nuevas versiones de mantenimiento disponibles para toda la pila de software, no sólo para una sola aplicación. 

Consideremos una instalación típica de cualquier empresa como ejemplo. Lo más común es que las instalaciones de la empresa incluyan las siguientes dependencias: sistema operativo, Java y MySQL. Cada uno de estos elementos de software se mantienen en un horario diferente y se distribuyen como binarios de software separados. 

Corregir o prevenir un problema en cualquiera de estos elementos tendrá un impacto positivo en sus usuarios. 

Por último, al supervisar las nuevas versiones de mantenimiento de software, también es importante prestar atención a las fechas de finalización del mantenimiento de las versiones instaladas en su pila de programas informáticos. 

Las versiones que ya no reciben ninguna actualización de mantenimiento deberían poner en marcha un proyecto de actualización para mantener a sus usuarios al día.

3. Urgencia de la revisión

Cuando reciba notificaciones sobre la disponibilidad de nuevas versiones de mantenimiento, haga que sea una prioridad revisar la lista de arreglos a fondo. 

Revisar esta lista le ayuda a comprender la urgencia de cuándo deben aplicarse los parches, especialmente si varios elementos del sistema tienen parches de mantenimiento liberados más o menos al mismo tiempo. 

Al revisar esta lista, los administradores deben hacer todo lo posible por revisar desde la perspectiva del usuario. Específicamente, hágase las dos preguntas siguientes: ¿cuál es el beneficio de aplicar este arreglo? ¿Cuál es el riesgo de no aplicar esta corrección?

Las correcciones de los problemas que sus usuarios han reportado son comúnmente las más urgentes de resolver. En ocasiones, habrá varias correcciones de mantenimiento que son necesarias para la pila de software completa. 

Cuando se desean varios cambios, es importante clasificarlos desde la perspectiva del usuario para que se puedan aplicar en este orden – más sobre esto en la siguiente sección.

4. Actualizaciones de la prueba

La siguiente mejor práctica puede parecer obvia, pero muchos intentan saltársela: ¡prueba las actualizaciones de mantenimiento! Específicamente, probar las actualizaciones de mantenimiento en un entorno de réplica sin producción primero. 

Al aplicar las actualizaciones de mantenimiento de software, recomiendo un enfoque científico. Por científico, quiero decir específicamente que deberíamos realizar una prueba de “control” sin aplicar ninguna actualización de mantenimiento. 

Después de eso, aplicar una única actualización de mantenimiento y volver a ejecutar el conjunto de pruebas. 

Las pruebas están destinadas a verificar dos cosas: (1) que los comportamientos que cambiaron coincidieron con las expectativas; y (2) que no se observaron cambios no intencionados.

En resumen, el proceso de pruebas debe tener tres pasos: (1) realizar una prueba de “control”, (2) aplicar una actualización de mantenimiento y (3) realizar una prueba de validación. 

Todos estos tres pasos deben realizarse durante la ventana de mantenimiento no productivo – esto permite a los administradores medir la duración necesaria para que la aplicación de la actualización pueda completarse con éxito durante el tiempo previsto. 

Para los administradores de sistemas más conservadores, también es una buena práctica probar la reversión de una actualización de mantenimiento en caso de que la producción produzca resultados diferentes a los de la no producción.

5. Replicar en la producción

La mejor práctica final que quiero compartir es repetir los pasos de la producción. Se pretende hacer hincapié en la repetición de los pasos. Este paso de nuevo tiene un enfoque científico. 

Específicamente, esperamos que si realizamos los mismos pasos en la producción que hicimos en la no-producción, deberíamos obtener los mismos resultados. No importa cuán similares sean los ambientes de no producción y producción entre sí, siempre habrá alguna diferencia en el ambiente. 

Dado que hay diferencias, se recomienda realizar los siguientes tres pasos: 1) realizar una prueba de “control”, 2) aplicar una actualización de mantenimiento y 3) realizar una prueba de validación antes de concluir la ventana de mantenimiento.

Utilizando estas prácticas óptimas, los administradores del sistema pueden mantener a los usuarios satisfechos y productivos con las actualizaciones de mantenimiento periódicas.